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Buena alimentación
El primer paso en cuanto a cuidados de la piel es llevar una buena alimentación, consumiendo frutas y verduras, evitando los alimentos con alto índice de grasas.
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Toma agua
Diariamente nuestro cuerpo realiza un sinnúmero de procesos en los que se pierde agua, por lo que la piel tiende a resecarse; evita la resequedad tomando a diario mínimo 8 vasos de agua para que tu piel luzca hidratada.
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Baño
Otro cuidado importante de la piel es mantenerla limpia, durante el baño debes restregarla suavemente para aumentar la circulación.
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Ejercicio
Realizar actividades físicas con frecuencia estimula la piel y le devuelve su juventud.
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Sol
Dejar respirar la piel se logra al no mantenerla abrigada en exceso, porque así el proceso de eliminación de toxina no se logra, haciendo que la piel se vuelva flácida y/o enfermiza.
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Sueño
El sueño es fundamental, dormir 8 horas ayuda a las células a recuperar su fuerza, manteniendo la piel en buen estado.
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Cremas
Ayudan a recuperar la humedad perdida y son muy útiles en tiempo de frío que es cuando la piel más se reseca.
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Rostro
Es la parte del cuerpo que más expuesta está en las actividades del día a día; la limpieza del rostro es básica, límpialo todas las noches para eliminar las impurezas del medio ambiente y los residuos del maquillaje.
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Manos
Las manos son usadas constantemente y expuestas a toda clase de elementos, por ello pueden llegar a lucir maltratadas. Para evitarlo hay que mantenerlas hidratadas, realizar un manicure y usar protector solar como cuidado de ellas.
